En la última década, las industrias eléctricas han experimentado muchos cambios a diversos niveles. Ello ha propiciado la aparición de subestaciones transformadoras prefabricadas con hormigón. Estas innovadoras estructuras ofrecen muchas ventajas prácticas a las empresas que las utilizan en las obras de construcción eléctrica. He aquí algunas razones para adoptar estos centros de transformación prefabricados de hormigón.
Bajos costes de construcción
Sea cual sea el ámbito de la construcción, la prefabricación es una técnica que ayuda a reducir costes. En el sector eléctrico, el ahorro realizado en varios frentes es sustancial. Estos ahorros se refieren principalmente a la mano de obra utilizada en la obra. Los centros de transformación se prefabrican a partir de hormigón en un único emplazamiento. Por consiguiente, se necesitan menos profesionales en la obra.
Mayor durabilidad
El desarrollo de estructuras en la industria eléctrica ha experimentado un cambio decisivo con la introducción de elementos prefabricados. Los centros de transformación prefabricados, por ejemplo, son más duraderos. Esto significa que no están sujetos a las diversas limitaciones que prevalecen en las obras de construcción. Por ejemplo
- Las condiciones meteorológicas
- El entorno
- etc.
Las características especiales del hormigón garantizan que los centros de transformación diseñados duren mucho tiempo. Además, los costes de mantenimiento también se reducen al mínimo porque las estructuras son más resistentes a los peligros.
Instalación rápida
La posibilidad de prefabricar centros de transformación eléctrica de hormigón facilita su instalación in situ. Como resultado, las empresas que trabajan en este sector tienen menos probabilidades de sufrir retrasos en sus calendarios de ejecución. En comparación con los métodos convencionales, la opción de la prefabricación ahorra una enorme cantidad de tiempo. Las estructuras eléctricas pueden instalarse rápidamente, dependiendo de la naturaleza del proyecto.
La preparación del emplazamiento se lleva a cabo mientras se diseñan los componentes del centro de transformación. Las empresas se limitan a realizar el montaje in situ en un tiempo récord. El trabajo es más fácil y preciso.